Para el pasado 21 de mayo estaba previsto que el mundo llegara a su fin . Por lo menos ese es el mensaje que llevaba predicando durante meses el iluminado Harold Camping , de 89 años, desde una emisora de radio ubicada en California, Family Radio . El profeta basaba sus aseveraciones en una serie de cálculos derivados de fechas claves extraídas de la Biblia, concluyendo que el 21 de mayo se produciría la resurrección de los seguidores de su doctrina. La expectación despertada por este anuncio fue mayúscula, al punto de que movilizó a muchos creyentes a predicar la Segunda Venida de Jesús. Algunos gastaron fortunas personales en empapelar ciudades con carteles anunciando el fin del mundo . Es el caso de Robert Fitzpatrick, un seguidor de Nueva York que desembolsó 140.000 dólares, los ahorros de una vida, en la elaboración de 1.000 pancartas en los que se podía leer “Terremoto mundial. El más grande de todos. Fecha: 21 de mayo de 2011” .