Y escribo "ovni" con todas las reservas porque si los testimonios obtenidos, a raíz de un extraño incidente ocurrido el 9 de julio de 1992 en el sur de Tenerife son ciertos, se confirman algún día, estaríamos más bien hablando de uno de los accidentes aéreos más misteriosos. Aquella tarde de verano, Juan José Hernández se hallaba circulando por la autopista del sur de Tenerife cuando, antes de coger la salida para dirigirse al pueblo de Abades, observó lo que él describe como un avión volando a baja altura, practicamente a ras del mar, muy cerca de la costa. Después de acceder a una carretera secundaria, se encuentra con un joven matrimonio que mira alarmado hacia la linea de playa. Hernández detiene su vehículo y se queda petrifificado cuando al dirigir su mirada al mar, observa el mismo avión, según sus palabras, posado encima del mar, como si hubiera caído, fruto de un accidente. Horas después se desplaza la Guardia Civil al presunto lugar del siniestro, así como numerosos...